Naranjo: Se trata de un árbol de porte mediano, perenne, de copa grande y redonda. Sus flores blancas, llamadas azahar y su fruto es la naranja dulce.
Álamo: Son árboles o arbolillos, de hojas simples y habitualmente anchas y de bordes enteros. El fruto, con forma de cápsula, es de color verdoso que se torna pardo al madurar, y libera numerosas semillas pequeñas que les confiere aspectos de copos de algodón.
Eucalipto: Son árboles perennes, de porte recto. Pueden llegar a medir más de 60 m de altura. Los bosques de eucaliptos pueden crear problemas de incendios incontrolables debido a la gran altura que alcanzan estos árboles en poco tiempo de crecimiento y a la fácil combustión de su madera.
Meandro: Curva pronunciada que forma un río en su curso.
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